Las finanzas, el gran reto de los deportistas profesionales

El ahorro y las finanzas son el gran reto para los deportistas profesionales durante toda su carrera. Aunque trabajan duro para lograr sus objetivos, muchas veces el dinero se esfuma a los pocos años. Es por ello que, principalmente el ahorro y la administración del mismo deben estar en el radar como objetivo vital. Y es que la vida laboral de un deportista de alto rendimiento es muy corta. Generalmente comienzan en la adolescencia, lo cual es ideal, incluso podríamos decir que excelente, pero se extiende poco más allá de los 40 años. Todo esto implica que en poco más de 20 años y con la mitad de expectativa de vida por delante, debe garantizar unos ingresos para él y su familia para el resto de su existencia. Esta extraordinaria situación no hace sino complicarse alrededor de un joven que ve unos ingresos que parecen ilimitados. Esta ilusión hace que gaste mucho más allá de lo necesario, sin pensar que en pocos años perderá esa fuente de ingresos. “ The goose that lays/laid the golden eggs” o lo que es lo mismo “La gallina de los huevos de oro” para los deportistas muere entre los 35 años, o poco más allá de los 40 años en los casos más excepcionales. Todo ello si no se sufre una lesión o si su rendimiento decrece mucho antes. Es por ello que el ahorro y los conocimientos sobre finanzas son vitales.

Muchos deportistas terminan arruinados por falta de conocimientos sobre el ahorro y no tener a nadie que les asesore de manera profesional e independiente
Es muy común que los deportistas profesionales terminen arruinados. Se tiene una explicación completa para ello. Y es que varios estudios de firmas de consultoría han obtenido conclusiones poco alentadoras… en Europa los futbolistas que dejan el deporte, entre el 50% y el 65% terminan en la bancarrota y después hay un porcentaje bastante alto que no terminando de esta manera, sí que merman sus ahorros considerablemente. En Estados Unidos los jugadores de fútbol americano que dejan el deporte, el 78% termina en la bancarrota. Asimismo, un estudio del año 2009 expuso que el 60% de los jugadores de la NBA terminan arruinados. Pero más grave aún es que esto ocurre apenas 5 años después de que se retiren. Aquí es donde reside la importancia de tener conocimientos sobre el ahorro y las finanzas, y de saber administrar y gestionar patrimonio; y si no es el caso, de contar con un asesoramiento profesional independiente. No sólo se trata de gastos, sino de cómo hacer que los ingresos se mantengan o aumenten su valor. Además es fundamental cumplir con las leyes y la agencia tributaria para evitar multas que dañen los ingresos adquiridos. Indudablemente son cifras a tener en cuenta cuando hablamos de la estabilidad y el futuro de un deportista de élite. Pero no sólo los futbolistas y jugadores de baloncesto se arruinan, esto es un mal que afecta al deporte en general.
¿Cuánto dura la vida laboral de un deportista profesional?
Entre 10 y 15 años sin lesiones grave, sin duda alguna, un corto período de tiempo para acumular ingresos y administrarlos para que duren el resto de la vida. Muchas veces el deportista inicia su vida profesional muy joven y sin la madurez necesaria para manejar tanto dinero. Es por ello que, el asesoramiento es clave para asegurar su futuro.

Un deportista joven necesita ayuda para madurar
Lo primero que hay que tener claro es que aunque hay muchos deportistas de élite, no todos se hacen millonarios. Y es que los contratos millonarios son solo para los deportistas más reconocidos, unos cuantos de la totalidad. Aún estando en equipos de primera división, si no son estrellas no tendrán un gran contrato. La idea de que todos los deportistas ganan lo que Messi o Cristiano Ronaldo es un mito.
Debemos distinguir dentro del deporte, las carreras de larga duración (como entrenadores, directores deportivos o directores técnicos) del caso del deportista de élite, con su carrera muy corta. En general, tienen una carrera limitada por sus condiciones físicas, el envejecimiento y las lesiones. Cualquiera de estos aspectos puede truncar tempranamente una carrera. Y al terminar, se rompe el flujo de ahorro. Según varios estudios de consultoras, un deportista tiene una vida profesional promedio bastante corta, dependiendo del deporte. Para el Tenis es de 12 años, Fútbol, de 16 años, Basket (NBA), de 6 años.
Teniendo esto en cuenta, debemos considerar que los ingresos y ahorros deben ser administrados y gestionados. Este ingreso debe servir para cubrir sus necesidades para el resto de su vida. Puede que esto parezca una tarea fácil, pero el entorno y la fama puede hacer a muchos perder la cabeza. Si a eso le sumamos el factor madurez debemos ser aún más precavidos y conscientes.

Pero qué significa el “factor madurez”
En la mayoría de las carreras profesionales (ingenieros, arquitectos, comerciales, etc.) hay un ascenso que se extiende a través de toda una vida profesional, generalmente el pico de experiencia (y de ingresos) se produce entre los 40 y 50 años. Ello se debe a que al finalizar los estudios, que la mayoría concluye a los 25 años, se empieza a adquirir experiencia. Y después empieza la experiencia profesional en las empresas, que suele ser un proceso largo, que tiene mucho de ensayo y error. Así, la persona asciende y va adquiriendo en diferentes partes de la empresa esa experiencia, consolidándose. En paralelo con la adquisición de experiencia profesional, el individuo adquiere también la madurez necesaria para gestionar los recursos adquiridos. A los 40 años una persona probablemente ha consolidado una relación de pareja seria, también habrá adquirido una casa después de ahorrar y esforzarse porque sus ingresos al inicio eran pocos. Esto va forjando una manera de pensar que es distinta a la de un joven de 20 años. Y es aquí donde reside el problema del deportista profesional, su carrera muchas veces empieza a los 15 o 16 años y el gran ascenso lo lleva a destacar probablemente antes de cumplir 20 años.

Cuando el resto de los profesionales está empezando a estudiar, el deportista profesional seguramente se encuentre en el momento más álgido de su carrera
Ciertamente hay deportistas profesionales con dilatadas carreras que siguen hasta los 40-45 años, pero son la excepción. Debemos tener en cuenta que tienen una alta probabilidad de lesiones. Ésta sería una de las causas más frecuentes para que acabe de manera prematura una carrera deportiva, y con ello, la estabilidad económica.

El factor fama y extravagancia
Sin duda, el otro factor que afecta la mente de un joven es la fama. Y junto a ella vienen asociadas muchas cosas. Se empieza a llevar una vida dispendiosa y hedonista, en la que aparecen todo tipo de admiradores, mujeres y hombres, y también gente aprovechada. Algunos buscan su minuto de fama junto al deportista, otros, parte de su dinero y el resto, sacar algo de provecho.
También está quienes los aprecian sinceramente, y son éstos los que le dirán la verdad que la mayoría de las veces no quieren escuchar. Quizás, por ello, también serán los primeros en ser apartados.
Juntemos a un joven inmaduro con la extravagancia y la fama y tenemos un cóctel explosivo. Si le diéramos oportunidad para madurar quizás la situación sería distinta. La extravagancia es un mal amigo. El tiempo no perdona, y cuando puede empezar a madurar, ya está en descenso. Ha agotado para entonces la mitad de su vida profesional y de sus recursos.
Es fundamental el asesoramiento de los más cercanos.

Si no encuentra sinceridad en su entorno, entonces, lo mejor que puede hacer es un buen contrato. Un contrato bien hecho, con abogados y gestores financieros serios e independientes, que lo lleven de la mano para la administración y gestión de sus ahorros y recursos.
Muchos deportistas, a sabiendas de la situación, se ponen en manos inexpertas o sin escrúpulos. Es en este punto donde se debe tener más cuidado.
Elegir un administrador y gestor de patrimonios
La administración y gestión de las finanzas no son un juego. Elegir un asesor, gestor o administrador no es elegir a un amigo. Éste le acompañara y le dirá lo que debe o no hacer y se asegurará de su futuro. En no pocas ocasiones a pesar de la opinión del joven deportista. Y para todo esto se recomienda firmar un contrato con un profesional, para que haga lo que no se sabe hacer: gestionar y administrar las finanzas e invertirlas de la mejor manera posible. Como un padre, deberá controlar sólo lo suficiente para que el futuro sea tranquilo y próspero. Pero a su vez, no debe ser simpático sino un profesional. Algunos deportistas caen en manos de estafadores ”pico de oro”. Otros dejan en manos de un amigo el manejo profesional de sus finanzas y la inexperiencia puede pasar una durísima factura. También hay quien elige el consejo de malos profesionales que terminan por meterlos en problemas de impuestos, estafas, negocios poco claros, etc.

Sin duda alguna, elegir a un administrador, gestor o asesor financiero no es algo que deba tomarse a la ligera.
Para terminar veremos a deportistas que después de una carrera deslumbrante han quedado en bancarrota.
Famosos arruinados por no ahorrar, no tener conocimientos sobre finanzas y no tener un plan
Boxeadores como Mike Tyson, uno de los más famosos, durante su carrera recaudó más de 300 millones de dólares. Todo eso se esfumó y en el año 2003 recurrió a los medios para que lo apoyaran para volver a encarrilar su vida. Su afición a las joyas y al lujo lo condujo al despilfarro, así como su adicción a la cocaína. Gracias a reconocer todos sus errores, se ha involucrado en reality shows y películas que lo han ayudado a recuperarse un poco. Evander Holyfield, perdió una fortuna, valorada en aproximadamente 250 millones de dólares. Su mansión de 119 habitaciones fue subastada debido a que no pudo pagar la hipoteca. El cuatro veces campeón del mundo tiene muchos problemas para pagar la manutención de sus 11 hijos. Actualmente sigue con su casa embargada por la falta de pago de las hipotecas. Poli Díaz (Boxeador español), conocido como el ‘Potro de Vallecas’ ha tenido problemas con las drogas, la violencia y con la autoridad. Perdió todo su dinero debido a ello.
Jugadores de Baloncesto como Allen Iverson, perdió su fortuna debido a su adicción a la marihuana, los juegos de azar y la afición a las armas. Antoine Walker, en 12 años ganó más de 100 millones de dólares que perdió por problemas con los juegos de azar y en los casinos. Una vida llena de lujos y la crisis inmobiliaria fueron claves en la pérdida de los más de 100 millones. Este manifestó en retrospectiva que sintió como algunos amigos y familiares a su alrededor se aprovecharon de su fortuna. En una entrevista dijo: “Durante mi carrera fui como un cajero automático”. Scottie Pippen, compañero de Michael Jordan en los Chichago Bulls, perdió una fortuna valorada en 120 millones de dólares. Esto se debió a las malas inversiones y negocios. Muchas de esas ideas salieron mal. Le prestó más de 15 millones a su asesor personal quien nunca le devolvió nada. Futbolistas Arruinados como Ronaldinho, sigue siendo un ídolo de todos los tiempos. Sin embargo, las deudas no perdonan. Sus deudas con la fiscalía Brasileña le arrebataron toda su fortuna. Una multa impuesta por construir en una zona protegida le quitó toda su estabilidad y su futuro. Garrincha, el famoso jugador de la selección brasileña que ganó los mundiales de 1958 y 1962. Si bien estaba preparado para la victoria, no estaba preparado para el dinero que venía con ella. Su dinero se fue en mujeres y alcohol y a sus 49 años murió en soledad y consumido por la adicción. Christian Vieri, a pesar de ingresar casi 100 millones de euros gracias a su carrera, está arruinado. Entre los gastos excesivos y las inversiones fallidas, este hombre lo perdió todo. Jugador de la Juve, el Inter, de la Fiorentina y del Atlético de Madrid. Así mismo, jugador de la selección de Italia. Sus últimos 15 millones de euros se esfumaron gracias a inversiones fracasadas. Andreas Brehme, quedó arruinado por la mala administración y las deudas acumuladas. Iván Zamorano, malos asesores financieros y peores inversiones hicieron que el futbolista chileno perdiera su fortuna. Actualmente se enfrenta a demandas por 3 millones de euros y los tribunales ya le han embargado varias de sus propiedades. Paul Gascoigne, el jugador inglés desde sus inicios tuvo problemas de disciplina. Empezó a los 18 años. Después de dejar el fútbol cayó en el alcohol y las drogas. En los últimos años se le ha visto un poco recuperado. George Best, es considerado el mejor futbolista irlandés de todos los tiempos. En 1968 llevó a su equipo a la victoria en la liga Inglesa. Ese mismo año recibió el premio al mejor jugador por parte de la revista France Football. Las mujeres y el alcohol fueron su vicio y su perdición. Fue tal su adicción que se le atribuyen las siguientes frases: “En 1969 dejé las mujeres y el alcohol… fueron los peores minutos de mi vida”. “He gastado mucho dinero en mujeres, alcohol y automóviles. El resto lo he desperdiciado”.

Otros deportistas arruinados, Michael Vick (Jugador de Fútbol Americano en la NFL): Después de ser condenado por organizar peleas de perros ilegales lo perdió todo. Su contrato por 130 millones de dolares y patrocinios por 8 millones se esfumaron. Su mala administración económica terminó por arruinarlo definitivamente. Marion Jones (Atletismo), cinco medallas en los Juegos Olímpicos de Sydney en Australia, 3 de oro y 2 de plata, no la salvaron. Un escándalo de dopaje la llevó a los tribunales con multas y prisión por medio año. Dos años de libertad condicional y sin dinero fue su resultado.